Diferencia entre oír y escuchar

La diferencia entre oír y escuchar tiene que ver con el tipo de procesos fisiológicos o cognitivos asociados a ella.

La audición es la percepción del sonido, lo que requiere el funcionamiento de los sistemas auditivo y auditivo para interpretar lo que significa.

Escuchar, por otro lado, implica no solo el acto de escuchar sonidos, sino también comprenderlos y responder a esos estímulos. Por lo tanto, involucra los procesos cognitivos de atención, atención, memoria y aprendizaje.

¿Qué es escuchar?

Oír es el acto de percibir el sonido, y como tal, se refiere a la capacidad física de recibir estímulos en forma de ondas sonoras e interpretarlos. Mientras caminamos por la calle, podemos sentir el viento, las bocinas de los autos o las conversaciones cercanas, y las estamos escuchando.

Escuchar no requiere una acción o voluntad específica. Los sonidos están en el ambiente y el sistema auditivo se encarga de captarlos.

En este sentido, la audición es la respuesta de nuestro cuerpo a los estímulos sonoros, no algo que podamos controlar a voluntad. Esto significa que no podemos evitar escuchar a menos que tomemos las medidas adecuadas (usar auriculares, taparnos los oídos o permanecer en una habitación aislada).

Oír proviene del latín audiere, que significa percibir el sonido.

¿Qué necesitamos escuchar?

Oír requiere el correcto funcionamiento del sistema auditivo, que consta de tres partes:

  1. Oído externo: Es la parte visible de la oreja. Se compone de lóbulos, pabellón auricular y membrana timpánica.
  2. Oído medio: Es la parte que conecta el oído externo y el oído interno. Está la cadena de huesecillos, que consta de tres estructuras óseas llamadas martillo, yunque y estribo.
  3. Oído interno: Contiene la cóclea (estructura similar a un caracol), las células auditivas y los nervios que envían el sonido al cerebro.

¿Cómo funciona el sistema auditivo?

El sonido está formado por ondas sonoras. Estos estímulos entran por el oído externo y generan vibraciones a través del tímpano. Estas vibraciones llegan al oído medio, donde la cadena de huesecillos se encarga de recibirlas y enviarlas al oído interno.

Cuando estas ondas de sonido llegan a la cóclea, impulsan la salida de las células ciliadas, que son responsables de convertir las vibraciones en impulsos eléctricos que luego se envían al cerebro a través del nervio auditivo.

Una vez en el cerebro, estos impulsos se interpretan como sonidos. Esto quiere decir que el sistema auditivo no se detiene porque este proceso sucede ininterrumpidamente en el ambiente y con todos los estímulos sonoros que podemos percibir.

Factores que afectan la audición:

Tener un sistema auditivo no significa que tenga la capacidad de oír. Varios factores afectan esta capacidad:

  • Patología (congénita o no congénita) que provoca la pérdida auditiva.
  • Edad: En algunas personas, el envejecimiento significa pérdida de audición
  • Trauma: Un accidente o lesión que daña el sistema auditivo.

Dependiendo del tipo de patología o trauma, es posible recuperar la audición total o parcialmente con la ayuda de un audífono o un implante coclear después de una evaluación médica.

¿Qué es escuchar?

Escuchar es el acto de notar los sonidos. Esto requiere el funcionamiento del sistema auditivo, así como otros procesos o funciones cognitivas y mentales.

Escuchar requiere la voluntad del oyente, porque si su sistema auditivo está funcionando correctamente, oirá. Pero es su interés, enfoque, concentración y memoria lo que le permite comprender, retener e incluso responder a lo que escucha.

Oír proviene del latín auscultare, que significa "agacharse al oído".

¿Cómo escuchamos?

Hay varios elementos en el proceso de comunicación:

  • Remitente: es la persona que envió el mensaje.
  • Receptor: es la persona que recibe el mensaje.
  • Código: es el sistema utilizado para crear el mensaje (español, código binario, etc.).
  • Información: es lo que se quiere transmitir o comunicar.
  • Canal: es el método utilizado para enviar el mensaje (teléfono, web, correo electrónico, etc.).
  • Ruido: Son perturbaciones o problemas que pueden surgir durante la comunicación.
  • Retroalimentación: es la respuesta que da el receptor, y en adelante se convierte en el emisor.
  • Contexto: Es la situación en la que se produce la conducta comunicativa.

Para que el proceso de comunicación se lleve a cabo con éxito, el emisor debe enviar el mensaje y el receptor lo recibe e interpreta. El destinatario tendrá que responder (feedback) si la situación lo permite, pero si no entiende o no presta atención al mensaje, no podrá responder correctamente.

Un ejemplo típico de escuchar es en un salón de clases donde todos los estudiantes escuchan lo que se dice, pero no todos escuchan.

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